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REFLEXIÓN 

Al iniciar mi carrera profesional pensé que seria algo mas difícil a todo lo que me había aprendido pues la verdad se me hizo muy raro que todo era un poco mas exigente pero me di cuenta que era igual como en el anterior colegio por que es igual solo que aquí te tienes que adaptar rápido y gracias a dios si pude dude pero ya soy puntual con mis tareas y le entiendo a las tareas no se me complican las tareas pero explicando los maestros muy bien ya que gracias a sus explicaciones le entiendo a las tareas por que todo se puede pero las materias comparten algo en común que es enseñanzas fáciles y no se equivocan al explicar ya que los profes explican muy bien cabe aclarar que cada uno ah su manera y lo que mas me gusto en todo este transcurso es los trabajos en equipo ya que en equipo trabajamos muy bien todos damos todo en el trabajo entregamos mucha dedicación en el trabajo ya que en equipo es mas fácil por que así cada quien se reparte su parte sin importar que tan difícil sea cada quien con su manera de trabajar ya que en equipo es mas complejo pues en las materias siento que algunas tienen relaciones con otras por su forma de repasar o dar su materia ah pesar de lo sucedido uno se acostumbra ya sea a trabajar en equipo o a entregar tareas puntual pero así como se entrega la tarea puntual hay veces que no le entiendo y pues se me complica pero al final de todo se sale adelante Por último, no me queda sino pararme y aplaudir a los distintos maestros que están transformando sus clases, la forma en que explican sus temas, la forma en que intentan llegar a sus estudiantes. A ellos y a los que trabajan conmigo —que en esta etapa de mi vida me han dado innumerables enseñanzas— todo mi respeto en estos momentos y sigan así. 

Con el tiempo seguiré aprendiendo a trabajar en equipo y ser mas unido en los trabajos de equipo. No podemos dejar de soñar, ése es en parte nuestro trabajo. Debemos ser creativos y albergar la esperanza de alcanzar lo que somos capaces de atisbar en el horizonte al que nos dirigimos con nuestros alumnos. Sólo si somos atrevidos para adelantarnos a los problemas posibles, si rompemos los estrechos moldes en los que a veces está cerrada la escuela, podremos provocar entusiasmo por aprender.

Si la educación reconoce el valor intrínseco de la personalidad de un niño y lo provee de un entorno apropiado para su crecimiento espiritual, tendremos la revelación de un nuevo completamente nuevo cuyas asombrosas características pueden contribuir a la mejora del mundo gracias ah que ah ello podemos ser alguien en la vida ya que así nos podemos desenvolver en un tiempo debido. 

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